Sobre muertes, desaparecidos y jóvenes vejadas sexualmente por la policía chilena.

Ejemplos de la vida real de la corrupción e inmoralidad del Estado 

y de la represión en Chile

Efectivamente, esta "palmadita en la mano" y "un tómese un helado y no lo vuelva a hacer" que les dan a un personal entrenado para reprimir, estimulado y autorizado para hacer todo tipo de tropelías, es la cara real de la justicia chilena. Aquí se da de hecho la violación que hace el Estado de Chile de los convenios de protección a la infancia y a la adolescencia, además de la violencia sexual a mujeres y adolescentes. Por cierto que las declaraciones Contra la Tortura se incluyen aquí.  Chile, al firmar estos acuerdos debería, además, implementar los protocolos de Estambul y los que corresponden a educar y prevenir que estas situaciones no se repitan. Pero estos se sigue repitiendo a gusto de los jefes que los aplauden. (Detalles de la noticia en: http://radio.uchile.cl/noticias/169339/)

Las vejaciones sexuales a menores y mujeres son la rutina. A niños y niñas. Una vergüenza que el gobierno no quiere reconocer y en su silencio se coluden, demostrando ser culpables no por omisión sino por directa comisión ya que ellos son quienes permiten esos crímenes. Los mismos que se golpean el pecho y se las dan de “buenos católicos”.  Les debe parecer normal que pueda decir “el general Muñoz insistió en que los adolescentes no quedaron absolutamente desnudos, sólo quedaron en ropa interior”. Y luego felicitan a Carabineros por su profesionalismo e integridad cívica… 

El problema es que la impunidad es el arma, la herramienta y el premio de los cobardes. Y es también la garantía de un sistema impúdico, basado en el lucro indiscriminado por un sector menor de magnates que son incapaces de considerar los derechos de un país entero.

El que estos carabineros hagan estos asaltos sexuales es porque se los autoriza: la idea es aterrar los estudiantes y a sus familias. para eso usan los instintos de un personal entrenado a hacer daño.  sean "juzgados” por el Sr Chahuán, Jefe del Ministerio Público, que es quien manda a fiscales inmorales y represores desvergonzados -y que luego se tornan consejeros en seguridad del propio Presidente- (caso de Alejandro Peña) no garantiza sino un mal chiste de Justicia. El otro lado de la moneda (¡y de la Moneda también!) es que los crímenes en Chile que hacen Carabineros son negados, renegados y pasan a la impunidad. Cuando "los pillan", como es el caso de Manuel Gutiérrez (menor inválido y en silla de ruedas, asesinado hace un año) o el del joven Mapuche asesinado por la espalda, Jaime Mendoza Collio. Él fue muerto en un operativo dirigido por el General Iván Bezmalinovic que no fue tocado. El ejecutor de los disparos ordenados y permitidos fue condenado (¡a los que mandan, no se les toca!) por que se demostró que no había actuado en legítima defensa. Sin embargo, la Corte Marcial, que funciona sin evidencias y que acepta el principio de obediencia, determinó que el disparo hecho por la espalda a un hombre desarmado era, finalmente, un acto de legítima defensa...! La Corte de Apelaciones eso ya lo había descartado. Y así se le revocó la sentencia. O el crimen del menor Alex Lemún, asesinado a quemarropa por un mayor de Carabineros: la "Justicia Militar" que solo está para asegurar impunidad y protección a Carabineros o uniformados, asegura al establecimiento del poder que cualquier crimen de Carabineros será dejado impune, o que la sentencia será remitida (no se cumple) o se les dejará firmando por un tiempo, y luego los tiran de nuevo a la calle a hacer los mismo desmanes de siempre. Y siempre como funcionarios de Carabineros con sueldos y promociones como si nada hubiese pasado..  

También es el Caso del menor José Huenante, desaparecido en Puerto Montt durante esta falsa democracia o dictadura legal. Sabiéndose quienes lo golpearon e hicieron desaparecer (tres carabineros conocidos que incluso alteraron la bitácora de uso del furgón de carabineros en que fue detenido) nada ha pasado y muestra la realidad de la Justicia inmoral que rige a Chile.  Por ello, la necesidad de que se haga una verdadera Asamblea Constitucional, como se ha hecho en todos los países que salieron de la dictadura. Las leyes actuales les permiten decir que "en Chile se cumple la ley" y "es igual para todos" como dicen los mentirosos/mentirosas justificadores de subsecretarios/as de gobierno en este y en gobiernos anteriores. Y, además como se prohíbe protestar los hechos y se les criminaliza si lo hacen, el gobierno tiene todo justificado y su represión es ejemplificadora, que auto-titula: democracia... Es la mentalidad represiva de "tener que ser obedecido" que imponen, como se los enseñara el General Pinochet, el cínico y nunca respetado... temido sí, entonces, por sus crímenes, aunque ya no se le tema ni a él ni a sus esbirros materiales e intelectuales. Me refiero al inspirador de todo el sistema socio-económico-parlamentario y represivo que en Chile se sigue imponiendo. Pero ya el miedo cultivado y ofrecido como respuesta única ya no les sirve: el pueblo mapuche, los estudiantes, los pescadores, los ciudadanos y la sociedad civil ya despertaron del letargo impuesto. Y esto no va a parar hasta que exista una democracia respetable.