Saturday, January 28, 2012

Carta del Premio Nóbel argentino, Adolfo Pérez Esquivel, al Presidente Piñera Protestando por la persecución al Pueblo Mapuche


El Estado y gobiernos de Chile tienen una sordera y ceguera proverbial: jamás reconocen errores y, por lo mismo, no los pueden enmendar (porque no quieren hacerlo) Además, los conflictos de interés de los miembros importantes del gobierno, del Presidente Piñera mismo, son enormes

Una nota desde el Chubut estimulada por una carta de Nora Brucolleri, argentina de Mendoza, luchadora por los DDHH’s en el mundo y gran solidaria con el pueblo chileno.

Adolfo Pérez-Esquivel, incansable Premio Nóbel de la Paz, es uno de esos indispensables de los que hablara Bertold Brecht. Son muchas décadas que reacciona y expresa su rechazo efectivamente a las violaciones a los DDHH's. Va donde es necesario y su respuesta por los pueblos del mundo es una constante. No cede ante los halagos e intentos de silenciarlo. Su oficio es el de los Derechos Humanos.

Esta es una muestra donde indica al Presidente de Chile, -ignorante y arrogante, además de torpe y represivo, como el que más- con detalles sobre el problema y de lo que es indispensable hacer.

La presión por la justicia en Chile, por la defensa del pueblo Mapuche, de sus mujeres, niños y ancianos así como de sus justas luchas, debe continuar.

En Chile se va generando un lucha unitaria por la niñez mapuche: una moratoria -es decir, un fin total que sea respetado por todos los represores- al asalto y guerra sucia contra las comunidades y hermanos Mapuche. ¡AHORA!
José Venturelli, Pediatra
Vocero del Secretariado Europeo de la Comisión Ética Contra la Tortura (CECT)
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Buenos Aires, 18 de enero de 2012 

Señor
Presidente de la República de Chile 
Dr. Sebastian Piñera 
SANTIAGO DE CHILE 


Me dirijo a usted para expresarle en primer lugar mi solidaridad por la difícil situación que atraviesa una importante zona del territorio chileno asolada por terribles incendios; por otro lado debo hacerle saber mi preocupación por las acusaciones que deben soportar los hermanos mapuches de ser los autores de los mismos, imputándolos como “actos terroristas”. 

Sus acusaciones, como las del Ministro del Interior Rodrigo Hinzpeter y el Intendente Andrés Molina, de la Provincia de Malleco, en la Araucanía, quienes les atribuyeron el incendio que afectó cuatro mil hectáreas, dieron por resultado un allanamiento con más de doscientos carabineros en la comunidad mapuche Cacique José Guiñón. 

En esa oportunidad, y a raíz de la exposición a las bombas lacrimógenas lanzadas a su hogar, Teresa Millaqueo, integrante de la comunidad y con ocho meses de embarazo tuvo que ser atendida de emergencia en el Hospital de Victoria, con un cuadro clínico de grave intoxicación, después de haber inhalado los gases y esperado hasta dos horas para la llegada de la ambulancia. Por otro lado, otro comunero, José Mariman Loncomilla se asomó por la puerta al escuchar los tiros, y fue entonces cuando recibió los disparos en el estómago y en el brazo que le dejaron heridas de balas de goma.

Y lamentablemente esto que sucede en Chile, se repite en otros países del continente, donde los pueblos originarios son blancos propicios de cargos por terrorismo. Sucede en Colombia, Perú,y en Ecuador, donde los hermanos indígenas sólo son culpables de reclamar contra medidas injustas, invasión y falta de consulta sobre diferentes obras que quieren instalarse en sus territorios. Y ahora que Argentina también cuenta con una Ley Antiterrorista, nos falta comprobar en qué momento y contra quiénes va a ser usada. 

Esperamos Señor Presidente, que tenga usted la grandeza de reconsiderar las graves acusaciones contra los hermanos mapuches y revertir la política de persecución a través de la aplicación de esta ley contra las justas manifestaciones sociales, ya que todos quienes conocemos la lucha por el reconocimiento territorial de los pueblos originarios, sabemos que ellos no utilizan la violencia para defender sus legítimos derechos. 

Reciba usted mis saludos de Paz y Bien. 


Adolfo Pérez Esquivel 
Premio Nobel de la Paz

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