...Mundo en el que vivimos,
aunque les pese a nuestros magnates fundamentalistas...
aunque les pese a nuestros magnates fundamentalistas...
El problema de proteger los
recursos naturales de un país -renovables
o no- debe ser algo que los empresarios chilenos de tendencia ultra, deben entender. Nacidos de una unión carnal contra-natura del egoísmo fascista y de su
amor desmedido por el lucro, además del sometimiento fanático por el imperio,
es decir, por su dependencia de lo extranjero, estos no logran entender los
aspectos centrales de una sociedad equilibrada, humana y fraterna. Su visión de
la sociedad, donde el lucro se contrapone virulentamente y pasa por encima de
los intereses del colectivo humano y del futuro, viola las expresiones de equidad,
justicia y derechos humanos, respetados por respetables. Demuestra la
incapacidad de entender que los derechos fundamentales no pueden separarse del
uso adecuado, equitativo socialmente hablando, de los recursos existentes. Por
ello, salud, educación, derecho a un lugar donde vivir decentemente, trabajos
dignos con salarios que permitan el merecido bienestar familiar y que, sabemos,
son posibles, se les escapan...
Leía una nota sobre Némesis, diosa griega que miraba la protección y el derecho a la justicia retributiva. Es decir, se preocupaba de quienes sufrieran excesos por maldad o por abusos, y promovía que fuesen protegidos. Como corolario, se entendía que quienes pudiesen "tener riquezas en exceso" es decir, desmedidas, exageradas, injustificables -como conocemos en nuestro rincón del mundo-, actuaba en forma anti-social, de manera delincuente. Así, Némesis se interesó en el caso de Creso, un rey enormemente rico, especie de billonario de estos días, que adoraba sus riquezas, le gustaban los placeres y las guerras... Creso, como nuestros magnates actuales, era una prueba de la incapacidad de actuar en forma decente en su sociedad. Y, como nuestros Cresos, era la prueba de una situación insultante a su sociedad toda. Naturalmente, la diosa lo castigó.
Leía una nota sobre Némesis, diosa griega que miraba la protección y el derecho a la justicia retributiva. Es decir, se preocupaba de quienes sufrieran excesos por maldad o por abusos, y promovía que fuesen protegidos. Como corolario, se entendía que quienes pudiesen "tener riquezas en exceso" es decir, desmedidas, exageradas, injustificables -como conocemos en nuestro rincón del mundo-, actuaba en forma anti-social, de manera delincuente. Así, Némesis se interesó en el caso de Creso, un rey enormemente rico, especie de billonario de estos días, que adoraba sus riquezas, le gustaban los placeres y las guerras... Creso, como nuestros magnates actuales, era una prueba de la incapacidad de actuar en forma decente en su sociedad. Y, como nuestros Cresos, era la prueba de una situación insultante a su sociedad toda. Naturalmente, la diosa lo castigó.
Lo anterior me hizo pensar en
Argentina al recuperar Repsol y su petróleo. Tratar de aplicar un cierto
sentido de justicia humana, de la buena. De no esconder la cabeza por las
etiquetas y gritos “¡al ladrón!” lanzados por nuestros propios Cresos
y que ya escuchamos por muchos lados. Saber identificar lo bueno y saber
separar el miedo de la cobardía, se va aprendiendo por todos lados. En Chile
también. El círculo
empresarial ultra pretende asustarnos con “eso es un robo” y con sus principios
de "justicias” de marras... emanan de una Constitución inmoral hecha en
dictadura y que los gobiernos perfeccionan en esa misma diabólica dirección. Era
lógico que viniera. Moverse con pasos fuertes hacia la nacionalización del petróleo
(o nuestro equivalente con la minería en Chile y otras fuentes importantes para
ese bienestar colectivo, urgente actual y del futuro) es tarea a poner en
primera línea. Una especie de sabio
consejo histórico, directo, el de esta genial Némesis. Si esa diosa nos viera y
nosotros no nos dejáramos asustar por los egoísmos torpes y el miedo crónico que
se ha usado por los oligarcas chilenos resentidos, seguro que nos sugeriría hacer
algo similar y, nosotros, lo encontraríamos, sin duda, formidable. Indudable que la Organizacion Mundial del Comercio, el Fondo Monetario Internacional y la OEA se enfermarían gravemente. Probable, más bien, seguro, que además, se
trate de usar un sentido xenofóbico, como siempre lo ha usado la oligarquía chilena
contra nuestros vecinos… Una forma de que los miremos con temor y rabia, y que
podamos, de ese modo, mantener nuestro pueblo con la mente ocupada en estupideces,
para que los negocios sigan siendo eternamente ventajosos, como siempre… Y, de
ese modo, tengamos más multimillonarios que otros países. Y también creer que
eso nos dejaría contentos. Las
luchas por la equidad, la justicia y un mundo fraterno son valores permanentes…
Gracias, hermanos argentinos, por recordárnoslo.
Para la noticia original en Pagina 12, ver: http://www.pagina12.com.ar/
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