La Justicia en Chile es una verguenza: los ladrones siguen libres y las víctimas son perseguidas y sus vidas aplastadas. ¿Hasta cuándo?

Este juicio es emblemático: implica a un miembro del Tribunal Constitucional que violó los términos del Debido Proceso, usando testigos encapuchados y todas las normas legales aceptables a nivel mundial. El abogado Juan Agustín Figueroa, que también ha sido el Director de la Fundación Neruda debería tener las mínimas normas de decencia social... Pero no se le pida eso cuando es parte del poder y el Despojo es parte del sistema. Y es bajo esa condición que ha podido beneficiarse con la "justicia a la chilena".

Se encarceló a los ahora querellantes Mapuche y sus vidas fueron transformadas en una pesadilla. Inicialmente sobreseídos por ausencia de evidencias, luego fueron condenados violando los derechos penales fundamentales y tuvieron que cumplir condenas por diez años (con algunos beneficios que no terminaron con la injusticia entonces ni la de ahora). Como corresponde a este país que aún funciona con su estructura legal de dictadura, las condenas siguieron y buscaron intimidar a todo el pueblo Mapuche. Pero se debe condenar a los verdaderos delincuentes y abusadores de las leyes aceptadas en el mundo democrático y no las de una Constitución Inmoral. La reparación para todos y cada uno de los detenidos y de sus familias y comunidades es fundamental si se quiere hacer alguna forma de justicia. Los juicios fueron hechos con la Ley Anti-Terrorista, instrumento dictatorial, y los condenados ni siquiera han podido retornar a sus trabajos previos. Patricia Troncoso no ha podido volver a enseñar en educación primaria..."porque la Ley maldita la define como peligrosa de por vida".  Y todos los condenados sufren de tener certificados de antecedentes (otra forma de persecución "a la chilena") definidos como delincuentes peligrosos... sólo porque el estado está en manos de delincuentes ilustrados.

Estas son nuevas razones para que se establezca una Asamblea Constituyente que permita llevar adelante una Constitución genuina, democrática y que permita avanzar hacia un país justo. Quienes se aferran a las leyes de Pinochet son sus cómplices y no se trata de personas equivocadas, sino de profitadores que lo han venido haciendo por ya cuarenta años.

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http://adkimvn.wordpress.com/2013/05/11/juicio-internacional-por-mapuche-han-sido-tratados-como-un-enemigo-interno/