Nada cambia en el país de la intolerancia: El Chile del poder establecido miente como respira.

   Abusos y violencia continúan contra el pueblo mapuche y contra quienes luchen por sus derechos. Se dispara a mansalva porque "es el derecho del Estado hacerlo" y no muestran la menor capacidad de reconocer sus actitudes inmorales.

Esta es una noticia inquietante. Muestra que el gobierno y las fuerzas policiales no tienen el más mínimo respeto por los derechos de las personas y que, además, actúan en forma racista contra el pueblo Mapuche. Por cierto que esa no es la forma como se conducen con los criminales de lesa humanidad y con los que apoyan los crímenes de lesa humanidad. No se atreverían ni a mirar a la gente si estuvieran en Vitacura… Es una expresión de cobardía y matonaje de clase.

El Colegio Médico y los trabajadores de la Salud, así como los más diversos sectores de la sociedad civil, los parlamentarios que genuinamente muestren un sentido democrático, deben pronunciarse unitariamente sobre la ausencia de respeto hacia la gente, hacia los menores y por el uso de armas que causan daños graves que luego el sistema de salud no atiende adecuadamente. Peor aún, permite que los servicios de urgencia se transformen en lugares donde pueden ir a detener a menores y adultos mapuche (y también a estudiantes y manifestantes que tanto molestan a las “autoridades”). 

Este mural, que se encuentra en la Librería de la Universidad de Chile, estuvo cubierto y cerrado al público durante los años de la dictadura. Recuperado unos 15 años después del fin del gobierno de la dictadura. Eran  años duros durante los que gobernara "un tiranuelo" que Neruda llamara "la mosca o el traidor": Es te mural fue parte de los trabajos con Pablo Neruda. "América, no invoco tu nombre en vano" (José Venturelli 1924-1988)

Chile permanece en una condición de paria y bandido público: sigue siendo el país de la intolerancia, que recuerda muy bien y sigue la misma conducta del dictador, aumentando el daño si es necesario para mantener su poder y los intereses de quienes se benefician con este sistema inmoral de sociedad. El gobierno debe detener esta conducta represiva que no deja sino campo para la indignación y el llamar a mayor unidad contra estas actitudes inmorales.

Nuestra solidaridad va, sin restricciones, hacia el pueblo Mapuche y sus comunidades. La violencia en Chile resulta de su obediencia a los intereses de quienes han beneficiado y siguen haciéndolo del despojo, y de la tozuda no aplicación del Convenio 169 de la OIT que, si fuese aplicada no se darían estos actos ilegales de las fuerzas especiales y las tierras que se sabe fueron parte del despojo serian devueltas a los propietarios históricos.  Es parte de la rutina estatal por ya tanto tiempo. Demasiado.

José Venturelli, Pediatra

Vocero del Secretariado Europeo de la Comisión Ética Contra la Tortura -  CECT-SE

Esta nota, recibida de la Alianza Territorial Mapuche: explica, nuevamente la rutina de la guerra sucia contra todo un pueblo. Llamamos a difundirla y exigir respeto por lo derechos fundamentales en Chile. http://alianzaterritorialmapuche.blogspot.ca/2012/07/temucuicui-disparando-quemarropa-fuera.html